En estas últimas semanas, el gobierno de Alberto Fernández decidió incorporar el subsidio a las tarifas de luz y gas en el cual más de 6 millones de argentinos se anotaron al beneficio.
El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, le pidió a Nación una tarifa diferenciada para los municipios en torno al alumbrado público porque si no “los vecinos se verán afectados por la situación”.
“En el contexto actual de re empadronamiento tarifario para la población en general, y en
función de lograr una distribución equitativa en términos tarifarios y de subsidios al consumo, creemos necesario que se contemple una tarifa diferenciada para los municipios. En caso contrario, serán los vecinos, quienes se verán afectados doblemente: tanto por sus servicios domiciliarios como por los incrementos del alumbrado que brindan sus ciudades”, dijo en una columna que escribió para Clarín.
Y agregó: “La gran diferencia es que los municipios son prestadores públicos de servicios
de carácter social y no obran con una pretensión de lucro. No es posible que paguen el
alumbrado como un shopping o una gran fábrica, el consumo de los Hospitales, Jardines
y Escuelas, los Campos de Deportes, las Estaciones de bombeo para prevenir inundaciones, las Bases de coordinación de móviles de seguridad, los Edificios administrativos para atender a los vecinos, Registros civiles, y Fiscalías, o Cementerios, por caso”.
También, Posse expresó que la medida tomada por el Estado es “bienvenida” pero que debe ser tomada por “mucho profesionalismo”.
“Entendemos que el Gobierno nacional al segmentar, pretende dar progresividad a las tarifas para que los que mayor capacidad tengan no paguen lo mismo que los sectores
vulnerables. Tal decisión es bienvenida, sólo que debe ser tomada con mucho profesionalismo a fin de evitar injusticias tanto entre domicilios particulares, como
también respecto a los municipios ya que se impondría una doble penalidad a los vecinos
al incrementarse sus consumos particulares como las tasas de Alumbrado, Barrido y Limpieza”, manifestó.
Además se mostró preocupado por los incrementos que hubieron en el alumbrado
público en los “seis primeros meses del año”.
“No se puede confundir un espacio de servicio con uno de lucro. Entre 2015 y 2022 el
alumbrado público, esencial para evitar situaciones de inseguridad, aumentó nada
menos que 4.800% y ya en los primeros 6 meses de este año sufrió un incremento de
45.5%. Según se dice, podría incluso seguir aumentando en un 400% de no existir una
tarifa social diferenciada”, sostuvo.