El Papa Francisco mantuvo un encuentro con los principales referentes de la CGT en el Vaticano este lunes por la mañana. Los sindicalistas le plantearon un cuadro crítico de la situación política y socioeconómica de la Argentina.
El sumo pontífice recibió una comitiva compuesta por trece sindicalistas, entre los que se destacaban Gerardo Martinez, Héctor Daer y Pablo Moyano. El encuentro duró poco más de media hora y tuvo a la situación socioeconómica del país como principal punto de discusión.
Los líderes sindicales hicieron hincapié en “el desarrollo, la producción y el trabajo” como los ejes principales que debería tener en cuenta el Presidente a la hora de gestionar. Moyano, en particular, fue quien más críticas esgrimió contra la gestión oficialista.
El Papa decidió tener una postura muy neutral y evitó realizar comentarios que luego pudieran utilizarse políticamente. Es por esto que ante los cuestionamientos realizados por el líder de Camioneros, se limitó a responder un sencillo “gracias”.
Ante la consulta de los sindicalistas sobre si visitará la Argentina en el futuro cercano, Bergoglio contestó que en octubre tendrá un encuentro de obispos en Bélgica que durará aproximadamente un mes. “Si Dios quiere, el año que viene voy a ir a nuestro país”, dijo, según señalaron desde la comitiva sindical.
La CGT le entregó al Pontífice una copia del documento llamado “Agenda para un nuevo contrato social”, difundido a mediados de abril, que utiliza la central obrera para debatir con otros sectores y en donde figuran propuestas de cambios en la legislación laboral, educación, política industrial, seguridad social, defensa nacional, política energética, transporte, reforma tributaria, protección del medio ambiente, reforma tributaria y seguridad, entre otros temas. El Papa prometió leerlo y darles una opinión al respecto.