Lula opinó por primera vez después de las acusaciones realizadas por un empresario contra Michel Temer y que también le salpican directamente, junto a la ex presidenta brasileña Dilma Rousseff, destituida el pasado 31 de agosto.
«Lo que queremos es la elección directa. Queremos que Temer salga ya. Podemos hasta perder, pero que sea en un proceso democrático», afirmó Lula en un encuentro del Partido de los Trabajadores (PT).
De acuerdo con una confesión realizada por los directivos del grupo JBS, la empresa pagó sobornos a Temer desde 2010 y, desde el año 2005, distribuyó entre Lula y Rousseff la suma de 150 millones de dólares, siempre por los favores realizados desde sus posiciones de poder.
Cabe recordar que Lula está imputado en cinco causas penales, la mayoría de ellas por corrupción, no citó las denuncias que pesan en su contra y volvió a dejar en abierto su candidatura para las elecciones presidenciales previstas para 2018. «Mi candidatura dependerá de muchas cosas, pero Dios quiera que (la cadena de televisión) Globo defina ya a su candidato», afirmó el expresidente.
Fuente: Infobae